El agua es el componente mayoritario de nuestro organismo y un recurso natural indispensable para la vida. Además, juega un rol esencial en nuestra alimentación cotidiana. Mantenernos adecuadamente hidratados es fundamental para el buen funcionamiento del cuerpo, ya que el agua participa en procesos clave como la regulación de la temperatura, el transporte de nutrientes y la eliminación de toxinas.

La nutricionista Gianella Pedemonte nos comparte algunas reglas básicas para asegurar una correcta hidratación:

1. Ingiere líquidos durante todo el día

Es importante beber agua no solo con las comidas, sino también entre horas. No esperes a tener sed para tomar líquidos, ya que la sed es un indicador tardío de deshidratación.

2. Elige agua como primera opción

Aunque hay muchas opciones disponibles, es importante saber que no todas las bebidas hidratan de manera efectiva. El agua es la mejor elección para mantenernos hidratados. Por otro lado, las bebidas como las colas y el mate no contribuyen a la hidratación adecuada.

3. Cuida la temperatura de las bebidas

Las bebidas muy frías o muy calientes pueden dificultar el consumo adecuado. Opta por temperaturas moderadas para facilitar la ingesta de líquidos a lo largo del día.

4. Considera tus necesidades individuales

Cada organismo es diferente. Aunque la recomendación general es consumir más de 1,5 litros de agua al día, lo más importante es observar el color de tu orina. Un tono transparente (excepto la primera de la mañana) es un buen indicador de una correcta hidratación.

5. Adapta tu hidratación a la actividad física

Si realizas actividad física intensa o eres un deportista de élite, es crucial reponer electrolitos además de agua. En estos casos, bebidas especiales pueden ser necesarias para mantener un equilibrio adecuado.

Un hábito clave para tu bienestar Hidratarse correctamente es una de las formas más simples y efectivas de cuidar nuestra salud. Recuerda que el agua es esencial para tu cuerpo y que mantenerte hidratado hará una gran diferencia en cómo te sientes y funcionas día a día.

¿Estás cuidando tu hidratación? Haz del agua tu aliada diaria.